jueves, 9 de julio de 2009

ELIEZER ROSILLÓN LUGO

MI PERRO

Mi pero es un castaño mastín de raza inglesa
Que en mi vida mustiada cifraba una promesa
De efecto perdurable, lealtad y adhesión;
Era un perro bohemio, convencido y patriarca,
Que tal vez en Armenia se escapara del Arca
Y enrumbara sus pasos hacia mi corazón.

Aquel perro, señores, me quería ¡Y no poco!
Como yo, parecía un sonámbulo un loco
Que en las noches gritaba su desesperación.
Parece que siguiéramos ambos un paralelo:
Los dos ladrando siempre, ladrando siempre al Cielo,
Reclamando justicia o implorando perdón…

Era guapo mi perro…Su elegante figura
Recortada en el fondo de su lámina oscura
A las flappers sonrientes causaba admiración
Y más de una vez pude percibir el murmullo
De una voz que dijera con acento de arrullo:
-Ese, chica, es el perro de Eliezer Rosillón…

A fuerzas, quién hubiera podido darlo en reto,
A fuerzas, no a fiereza que más sano y discreto
No creo se consiga fácil otro mastín…
El hubiera deseado poder dar la mano
A quién a mí viniera para decirme: - Hermano,
¿Cómo están por tu casa?...vamos al botiquín…

Mas, - la eterna leyenda – como el perro era bueno
Y, auque altivo y rebelde, filósofo y sereno,
A espalda mía mano traidora lo arrojó;
Y, cuando yo, de nuevo vencido por la suerte
No vi en el patio al perro, sentí un frío de muerte
Que por siempre en mi alma se perpetuó.

¿Dónde el mastín iría con su hartura de angustia
Buscando mis caricias con su mirada mustia
En probable cosecha de oneroso desden?
¡Oh, yo pienso, aterrado, que un día no lejano,
A mí propio esa misma rapaz e innoble mano
A impulso de sus odios me arrojará también…

ELIEZER ROSILLÓN LUGO.
Nació en Maracaibo en fecha aún no conocida y murió en la misma ciudad en 1934. Fue escritor (poeta), perteneció a los epígonos del grupo Seremos, Escribió en la publicación "Orión" y mantuvo una tertulia literaria en la plaza Urdaneta. Fue creador de un verso sencillo y lleno de melancolía.

JESÚS BRÍÑEZ RODRÍGUEZ

INDO – ESPAÑOL

Yo soy de aquella raza indómita y salvaje
Sin leyes dominantes, sin otro Dios que el Sol.
Pero también advierto que afluye en mi arteriaje
La roja hemoglobina del árabe español.

De América es mi carne; mas hubo en mi linaje
La fuerza de dos savias en un solo crisol;
Tal vez por eso amo la capa y el tatuaje,
La espada toledana y el limpio caracol.

Cuando alguien me pregunta por mis antepasados,
Surge ante mí un desfile de Reyes ataviados
Y el molde de un cacique bronceado por el sol.

Y sólo decir puedo: es dúplice mi origen;
O soy de España un noble con alma de aborigen,
O un aborigen noble con alma de español.

JESÚS BRÍÑEZ RODRÍGUEZ.

Nació en Maracaibo y murió en la misma ciudad aproximadamente en 1936. Zapatero y escritor. Poeta popular, hijo del repentista Antonio Bríñez, escribió numerosos poemas que han quedado dispersos en periódicos y revistas de la época post- seremista (grupo Seremos), sobre todo en los órganos informativo Orión y Simiente. Rebelde y de verbo encendido, fue laureado en Buenos Aires por su soneto
“Indo – Español”.

SERGIO REYES MEDINA

A SOLAS CON MI CORAZÓN

No ha de volver…En vano es que la esperes
Con obstinado afán, corazón mío…
Cesa de tan inútil desvarío,
Ya que es imposible lo que quieres.

¿Para qué ha de volver? Si ya te mueres,
¿Para qué ha de volver? Si estás vacío,
Entristecido, atormentado y frío,
Al recuerdo feliz de tus ayeres.

No ha de volver…En vano es que la aguarde.
Una voz interior nos grita: “es tarde
Para soñar en los pasados días”…

Hoy apenas nos queda del pasado:
Tu angustioso latir precipitado
Y el gris borrón de las tristezas mías.

SERGIO REYES MEDINA.
Poeta lírico zuliano de la primera mitad del XX, que dirigió con Humberto Campos Brices la revista de ciencias, letras y arte “Baralt”, en su etapa estudiantil, durante los años treinta. Su obra poética quedó dispersa en periódicos y revistas de la época. Murió adolescente, lo devoró la Tisis antes de 1945. Bien supo empapar sus versos con el filtro del dolor hasta su muerte.

GUILLERMO PARRA CHIRINOS

Fragmentos

CANTO A LA REINA DEL
CARNAVAL DE MARACAIBO
Premio único del certamen 1954

Alzo por ti, mi copa de irisados cristales,
Para ofrendarte, oh Reina de manos virginales

El vino de mis viñas, escarlata y ardiente,
Y el aroma de sándalo de este himno ferviente;

El oro de las tardes y la roja alegría,
De las ferias gitanas allá en Andalucía;

El manto de brocado que, en regios carnavales,
Lucieron, en Venecia, las princesas ducales,

Que cruzaban en góndola los dormidos canales,
Donde espejan sus cúpulas las viejas Catedrales,

Y el antifaz bordado, de rojo terciopelo,
Que realce la gracia de frente y tu pelo.

Yo vengo de muy lejos, a darte en mis cantares,
La miel que dan, en verso los rubios colmenares

Soy un juglar, Señora, que cruzó mil caminos
Con los odres henchidos de timiamas y vinos,

En busca de aventuras y de cárdenas flores,
Para saciar mi alma de penas y de amores.

Busqué la estrella errante de las rutas marinas,
Para enjoyar con ella tus manos marfilinas;

Pero no la encontraba, por que este siglo impío,
Perdió la fe, Señora, y mi tosco navío,

Cruzó entre nubes densas las tardes tempestuosas,
Sin celaje de grana, que son como las rosas,

Con que viste el ocaso de gloria el firmamento
El mar es azaroso, pensé por un momento,

Y abandoné los mares y seguí los caminos,
Con odres henchidos de timiamas y vinos.

Pero los arenales ardían como soles,
Sin camellos ni oasis de verdes quitasoles

Donde acampar mis éxodos de gitano andariego,
Como aquel impaciente, luminoso manchego,

Que nos pintó Cervantes con prosa de cristal,
En las páginas áureas de su libro inmortal.

Y quise abrir mis tiendas al margen del sendero,
Pero las hizo trizas el Simún altanero.

Más aprendí muy pronto que la dicha y la calma,
Están en veneros recónditos del alma…

Hoy por eso, retorno, Sultanas de mis lares,
Con la alforjas llenas de perlas y cantares,

Estrofas en que puse la miel de mis azares,
Como ponen en sus cuitas, en la perla, los mares.

Recibí estos versos, de gitano hechicero,
Que son los amuletos con que ofrendarte quiero…

Son mis flores oh Reina de mágicas virtudes,
Cortadas bajo el cielo de aquellas latitudes.

Soy juglar de esta tierra soñadora y bravía,
Que en versos y canciones enantes florecía.

Mas ya se fueron todos los troveros, Señora;
Sólo queda la rima del Lago que los llora;

Se fue Idelfonso Vázquez, de versos diamantinos,
Con aljaba de dardos y el cofre de sus trinos;

Se fue Marcial Hernández, de cincelada prosa,
Con el hechizo mágico de su voz ardorosa;

Y también Sánchez Rubio, de recio bardo indiano,
De quemantes estrofas como un sol meridiano,

Se fue Dimas Ramírez, de dulces madrigales,
Con su enjambre de abejas, de alondras y quetzales;

Y se apagó aquel astro de dáctilos radiantes,
Que se llamó Udón Pérez, segador de diamantes,

Y se nos fue Lossada, de dulce labios buenos,
Con ciencias profusa que impregna sus trenos.

Oh tierra de poetas, que al progreso te inmolas,
Con tu Lago y tus astros que hoy platican a solas.

Que hoy platican a solas en las noches discretas,
Sin que escuchen sus diálogos como ayer, tus poetas.

Por eso de muy lejos para ofrendarte vine.
Con flores y cantares, permíteme que trine,

Permíteme que deshoje, sobre tus manos reales,
Las rosas de mis versos sencillos y liliales.

Son flores cultivadas en jardines lejanos,
Que serán menos bellas al estar en tus manos;

Jazmines de Tokio de exquisita fragancia
Que llevaron los galos a los huertos de Francia;

Mas tú eres la Reina de la loca alegría,
Pon ella tu risa, que es luz y es poesía

GUILLERMO PARRA CHIRINOS. Nació en Maracaibo en 1917.
Doctor en Ciencias Políticas y Sociales, abogado, profesor Universitario, parlamentario, escritor, etc., además de haber escrito obras que quedaron dispersas en la prensa regional: Como Aquella Primavera (cuento), Hombres y Letras del Zulia de Ayer, El Contrato del Trabajo, etc.En 1941 gano el primer premio del certamen de versos del Círculo Artístico del Zulia. Premio Único en el certamen Flores a la Reina en 1954. Fue Vicepresidente fundador del Círculo Zuliano de Escritores.

martes, 7 de julio de 2009

JOSÉ SANTOS MORÁN

URDANETA

Sobre la sacra cima del pedestal vetusto
Se yergue como un cóndor soberbio y altanero;
La mano sobre el pomo del rutilante acero
Y en el semblante el rasgo de la virtud del justo

Templó la servidumbre con alma y ceño adusto,
Y fue brújula inmácula de limpio derrotero;
Y ante la furia bélica del valeroso ibero
Jamás tembló de espanto su corazón robusto.

Ungido por Minerva, mimado de Belona,
Vio rodar a sus plantas el centro y la corona
Y rota la cadena de negra iniquidad.

¡Y así, vaciada en bronce su heráldica figura,
Está el soberbio Cóndor sobre la basa dura
Como un ejemplo vivo de Gloria y Libertad.

JOSÉ SANTOS MORÁ
Nació en Maracaibo en 1907, y murió en Maracaibo en 1945.
Fue periodista y escrito (poeta). Autor del Canto a San Martín, premiado en el certamen de los Juegos Florales en Buenos Aires, en 1934, igualmente con El Canto a la Paz en 1937.
Fue uno de los fundadores de la sección de Literatura del Circulo Artístico del Zulia.

lunes, 6 de julio de 2009

ALBERTO J GONZÁLEZ

Abre el sol la puerta de su estancia:
Hay fragancia
En el polen intáctil de las flores,
Las montañas se visten de fulgores
Y los prados se colman de belleza.
Rima el trabajo su feraz poema;
Hay en la yema
La gestación del tallo y de la rama,
Del rico germen la creadora llama
Crepita en las entrañas de la tierra.
El copo de algodón es nívea tela
Que cual estela
Del progreso avanza por el mundo,
Envuelve el virginal vientre fecundo
De la novia que es ámbar de la vida.
Los niños se congregan en aulas y planteles
Ante los anaqueles
De los textos de ciencia, de los tomos de historia,
Y el secreto divino se graba en la memoria
Con el cincel brillante del verbo del maestro.
Todo vibra en la tierra, todo late,
Y sirve de acicate
A los seres que usan de la ciencia
Para enrumbar del hombre la existencia
Atando vicios y segundo males.

II

Mas una voz de mando surge airada
Y es llamarada
Que calcina los hombres y las cosas,
Envueltos en las nubes tenebrosas
Que surgen del estruendo de la guerra.
Ya no vibra el poema del Trabajo,
Marcha a destajos
El arma fractisida y destructora
Y se escucha doquiera aterradora
La ruda carcajada de la muerte.
Ruedan tronos, monarcas y coronas;
Todas las zonas
Donde antes reinaba la bonanza,
Se convierten en campos de matanzas,
De hambre, desolación dolor y ruina.
La ciencia, el arte, la niñez, la vida
Sufren la herida
Del fuego de terribles bombarderos
Y avanza asolador por el sendero
El jinete infernal de la barbarie.
El mundo es un juguete de sórdidas pasiones,
Los cañones
Son los árbitros de todos los reclamos
De los pueblos en ruinas. Son los amos
De la vida y haciendas de los hombres.

ALBERTO J GONZÁLEZ. Nació en Maracaibo en 1895. Murió en Maracaibo en 1965. Llegó a bachiller, su pobreza y ser huérfano, no le permitió seguir estudiando, durante sus estudios fundó un Seminario
“ Principios”, luego una revista, y en 1924 fundó el seminario El Venezolano, en 1936 entró en la redacción del diario Panorama en sección Cartera del Cronista que fuera más tarde sucesos.
Su columna Nivel (en Panorama), le ocupó largos años de su vida. Abordo temas de fondo históricos en sus valiosos y extensos reportajes. Obtuvo varios reconocimientos, como los premios de Periodismo Municipal Eduardo López Rivas, nacional Juan Vicente González, así como la orden Francisco de Miranda. Sus poesías fueron recogidas en su libro Vibraciones.

ARMANDO SIMONS PLUMACHER

CANTO A VENEZUELA
(Fragmentos)

¡Oh inquietud de la vida que acrecienta el anhelo
De la emoción!...¡ Oh, Patria ya vuela mi cantar
Desde el Coquibacoa, que es espejo del cielo,
Hasta el recio Orinoco que es la vena del mar!

En ti palpita el beso del mar de las Antillas;
Por el sur el Brasil te da su cántico;
Colombia te adormece con voz de maravillas
Y te envía un saludo por el este el Atlántico,

……………………..

Maracaibo es la luz que en su camino
Nimba sus sueños de esplendor. Y el cielo
Junta su azul vibrante con el azul del trino
Perdido entre su fronda que es el pudor del suelo

Sus mujeres que llevan la turgencia española
Y el esplendor indiano sobre sus inquietudes,
Dominan en el seno la magia de la ola
Y en el alma el encanto de las sietes virtudes.

El ensueño es el astro que figura en su meta
Y su vientre es el vientre puro del ideal,
Que ofrece a las batallas la espada de Urdaneta
Y brinda en los bufetes la espuma de Baralt.

ARMANDO SIMONS PLUMACHER.
Nació en Maracaibo en 1903, y murió en Maracaibo en 1932
Fue: Poeta, prosista y periodista. Estuvo ligado a los grupos, Seremos y Vertical, fue colaborador de las revistas y periódicos: Índice, El País, Excelsior y Maracaibo Gráfico. Fue laureado dentro y fuera del país, sus obras celebradas; “Pastiches Criollos”, con tinte de ironía, y sus poemas, Canto a Venezuela y El de Dietario Sentimental
Fueron muy alabados.

ARMANDO TROCONIS MONTIEL

MUERTE

Ha muerto un hombre y quiere que yo vaya
Con él al cementerio.
Cuando murió la fe, luz de mi alma,
Nadie asistió al entierro.

Dejan, los que abandonan esta vida.
Su huella en el panteón
Y en su tumba, hecha altar, manos amigas
Colocan una flor.

Yo he muerto. Hace ya tiempo; a mi sepulcro
Nadie viene a llorar,
Y es por que nadie sabe que mi tumba
Dentro de mi pecho está.

ARMANDO TROCONIS MONTIEL
Nació en Maracaibo, en 1867, y murió en Maracaibo en 1896. Fue: periodista y poeta. Usó los seudónimos de Jig y A. T. Romántico, de la escuela Yepes y Vázquez. Fue un hombre enfermizo y débil, poeta sensible que estuvo inmerso en una actitud de hastío y tedio. Escribió un monólogo en versos titulada Romántica, fue incluido en su obra póstuma Prosa y Verso.